así mismo... anoche fue una de aquellas noches, que cualquiera que tenga hijos comprenderá sin explicación, nos acostamos con una lluvia tremenda, pensábamos que a San Isidro se le había roto una cañería o algo así, pero después de una semana en que el aire de Santiago de Chile estaba irrespirable, se agradece.
D con una horrible tos toda la noche, que me dejaba pegada al techo, aún estando él en su dormitorio y yo en el mío, N a las 4 am despertó con fiebre, y nos dieron las 5:30 am esperando que se durmiera, pidiendo "malalinas"(mandarinas). Yo, me defino como una mamá paciente, no exagerada, me tomo las cosas con calma, y espero la evolución para correr con ellos al médico. Anoche apliqué antipirético y esperar que bajara. Hoy ya no hay fiebre, pero un festival de mocos y tos. Tampoco soy muy buena para dar medicamentos (ja!...y para eso estudié). Pero aquí es cuando entra el título del post de hoy, me gustaría tener poderes mágicos para quitarles la tos, la fiebre y molestias. Cuando no puedan dormirse, cerrarle los ojitos y que descansen sin preocupación. En fin...no los tengo, pero intento suplirlos con todo mi amor...
Para hacerlos sentir mejor, ésta tarde prepararé unas ricas uvas confitadas, será primera vez que las hago, veamos como nos va...
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